jueves, 2 de julio de 2009

La verdad sobre lo que pasa en Honduras


Sigo con el tema Honduras, porque no puedo creer que hayan vendido una nube de humo y, hasta el momento, nadie puso el grito en el cielo.

Si Correa y Chavez defienden al presidente que pusieron patitas en la calle, entonces el tema me huele muy mal. A nuestra reina la quuieren llevar de las narices para hacer un ridículo semejante al que hizo su marido cuando viajó a la selva a rescatar a un chico que hacía tiempo vivía con sus parientes. Ya tenemos algo nuevo para exportar: ridículo kirchnerista.

El otro papelón es la OEA. No hay caso con el progresismo rancio, no terminan de entender que hoy día, no se puede engañar a todos todo el tiempo, teniendo internet y los servicios de información trabajando al segundo. Vamos a ver que, a medida que vaya pasando el tiempo, solamente quedarán gritando los de siempre: Evo, Correa, el payaso bolivariano, Ortega y nuestra Cris.
Cuando oí la primera versión de la noticia, me dije "¡no aprendemos más!" haciendo responsable a las fuerzas armadas hondureñas del desastre. Hoy me digo "¡no aprendemos más!" pensando en la actitud fascista y troglodita de la zurda latina; ampliamente apoyada por algunos medios de comunicación.
Brillante el artículo de Emilio Martinez que encontré aquí. Va un adelanto. Si le gustó lea el resto sino, tómese una Garompa.

"Volviendo a Honduras, el impeachment contra el ex presidente José Manuel Zelaya había comenzado la semana pasada, luego de que éste desatara una crisis institucional al incurrir en reiteradas violaciones de la Constitución, las leyes y sentencias judiciales, según lo definiera el Congreso de esa nación centroamericana.

La deriva de Zelaya hacia el autoritarismo se inició en el 2007, a medida que fue estrechando relaciones con Hugo Chávez y comenzó a poner en práctica el método de golpe gradual que el gobernante caribeño ha exportado a varias repúblicas de América Latina, sistema que incluye la persecución a la prensa y un proceso constituyente ilegal como vía para perpetuarse en el poder.

El detonante de la crisis fue, precisamente, la intención de Zelaya de realizar una consulta el pasado domingo 28 de junio, que le permitiría instalar una Asamblea Constituyente, disolver el Parlamento y habilitar su reelección presidencial.

Aunque el Tribunal Supremo Electoral dictaminó que esa consulta era inconstitucional, el depuesto presidente instruyó a las Fuerzas Armadas la distribución de 15.000 urnas para la votación, orden que fue resistida por el Alto Mando militar por tratarse de una instructiva que contravenía la sentencia mencionada.

En respuesta, José Manuel Zelaya destituyó el pasado miércoles al jefe del Estado Mayor Conjunto, general Romeo Vásquez. La Corte Suprema de Justicia ordenó restituir a Vásquez en sus funciones y mandó el embargo de las ánforas en los cuarteles, pero el prochavista Zelaya invadió con sus simpatizantes una base militar y retiró las urnas para utilizarlas en la consulta.

Como resultado de estos hechos, una comisión multipartidaria nombrada por el Congreso para investigar al presidente concluyó que éste violó las leyes. Además, pidió al Parlamento que declarara a Zelaya incompetente y le iniciara un proceso legal.

Cabe destacar entre las bases jurídicas de la impugnación que el artículo 239 de la Constitución de Honduras señala que “El ciudadano que haya desempeñado la titularidad del Poder Ejecutivo no podrá ser Presidente o Designado. El que quebrante esta disposición o proponga su reforma, así como aquellos que lo apoyen directa o indirectamente, cesarán de inmediato en el desempeño de sus respectivos cargos y quedarán inhabilitados por diez años para el ejercicio de toda función pública”.

De todo lo anterior, se desprende como conclusión que el Parlamento de Honduras actuó para evitar un golpe de Zelaya contra la institucionalidad democrática, votando su destitución por unanimidad y posesionando como nuevo mandatario al presidente del Congreso, Roberto Micheletti, a quien correspondía asumir el cargo por sucesión constitucional. La decisión contó con el respaldo de la Corte Suprema de Justicia y del Comisionado Nacional de Derechos Humanos (Ombudsman).

Es decir, que el Congreso procedió al impeachment, al “bochorno” de Zelaya."

2 comentarios:

ar mo dijo...

Muy didáctico tu escrito, te lo agradecemos infinitamente porque desde la distancia podría uno no entender lo que estaba ocurriendo, aun cuando estabamos claros que allí tenía las manos metidas el DESCARRIADO de venezuela y que seguro desde aquí se estaba ingeniando las trampas, pues la franquicia que vende chavez las lleva de regalo como una ñapa para acabar con la democracia de los demás paises tal cual esta acabando con la nuestra.

Pablo dijo...

Gracias ar mo. Me parece que debemos difundir lo que realmente está sucediendo y no, lo que nos quieren vender.
Efectivamente, creo que Chavez está vendiendo franquicias, como tu dices, para el mal, copiando lo que hace muchos años hizo el Coma Andante desde Cuba. Lo que no se da cuenta el bolivariano, es que la coyuntura internacional y latinoamericana es diferente.
Solamente espero, que su locura personal no genere algún conflicto bélico regional, que creo está buscando con desesperación desde hace un tiempo.
Saludos y gracias por visitarnos.